El consumo local, también conocido como economía local, se refiere a la circulación del dinero dentro de una comunidad. Este proceso fomenta la creación de empleo, el desarrollo de la comunidad y una mayor conexión con el entorno local.
Además, el consumo local ofrece la ventaja de adquirir alimentos más frescos, ya que provienen directamente del agricultor y es probable que hayan sido cosechados esa misma semana. Esto no solo permite conocer el origen de los productos, sino también establecer relaciones directas con los productores y fortalecer el tejido social. Al mismo tiempo, se reduce significativamente el uso de envases plásticos, que a menudo terminan en los océanos, y se minimiza el empleo de combustibles fósiles en el transporte, contribuyendo así a la disminución de las emisiones de CO₂ y a mitigar los efectos del cambio climático.
Comprar local contribuye a los siguientes Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS):
ODS 1: reducción de la pobreza porque se mantienen y se crea puestos de trabajo;
ODS 2: en el caso de los agricultores logra que se mantengan su trabajo sin poner en riesgo la producción de alimentos;
ODS 8: promueve el crecimiento económico local;
ODS 12: consumo responsable porque utiliza menos empaques;
ODS 13: acción por el clima con la reducción en el uso de combustibles fósiles, generadores de CO₂ y efectos negativos en el cambio climático;
ODS 14: se utilizan menos empaques plásticos que terminan en la mayoría de las veces en los océanos;
Link de los mercados locales en Basilea: https://www.bs.ch/fr/Portrait/marches/marche-de-la-ville.html
コメント