El arte tiene el poder de transmitir ideas y despertar emociones, ha sido un motor de cambio social. Desde denunciar conflictos bélicos hasta promover la libertad, ahora adopta un nuevo desafío: la sostenibilidad. En este contexto, el artista colombiano Rubén Trespalacios ha logrado reunir en una sola obra los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). A través de su estilo optimista, Trespalacios nos invita a reflexionar sobre nuestras acciones y el legado que dejaremos a las futuras generaciones, subrayando la importancia de contribuir hacia un planeta mejor para todos.
Los objetivos de desarrollo sostenible (ODS) según el artista Rubén Trespalacios
En su obra, Rubén Trespalacios representa los ODS mediante un lenguaje visual cargado de simbolismo. Cada elemento refleja su estilo vibrante, donde los colores y las formas transmiten poderosos mensajes. Desde el ODS 1 (Fin de la Pobreza), simbolizado por seis círculos, representan una familia, hasta el ODS 17 (Alianzas para Lograr los Objetivos), destacado por cinco anillos entrelazados, el artista crea una red de significados que conecta cada objetivo.
La igualdad de género (ODS 5) se simboliza con un signo de suma, mientras que un signo igual en rojo representa la reducción de desigualdades (ODS 10). Los bloques angulares sugieren infraestructuras sostenibles (ODS 11), se entrelazan armónicamente con elementos que evocan el trabajo decente y el crecimiento económico (ODS 8). La trilogía de superficies cúbicas representa la industria, innovación e infraestructura (ODS 9). En la composición, dos círculos en tonos amarillos destacan: uno simboliza la producción y el consumo responsables (ODS 12) y el otro representa la energía asequible y no contaminante (ODS 7).
Una paloma, símbolo universal de paz (ODS 16), completa la obra, mientras que un pez en la parte superior representa la vida submarina (ODS 14), subrayando la importancia de preservar los ecosistemas acuáticos. La silueta verde de un árbol evoca la vida de los ecosistemas terrestres (ODS 15), enfatizando la protección de la biodiversidad.
En el centro se encuentra un cuaderno que simboliza la educación de calidad (ODS 4), fundamental para el desarrollo sostenible. En la parte superior, un tono azul claro alude a la gestión sostenible del agua y saneamiento (ODS 6), y un ojo resalta la urgencia de la acción climática (ODS 13), recordándonos la necesidad de actuar frente al cambio climático. Un pocillo amarillo ilustra la lucha contra el hambre (ODS 2) y un corazón, elemento distintivo del artista, representa salud y bienestar (ODS 3).
El artista detrás de la obra
Originario de Barranquilla, Colombia, Rubén Trespalacios se distingue por su uso vibrante del color y su estilo abstracto que refleja la energía de su tierra natal, transmitiendo optimismo y felicidad. Con una trayectoria destacada, ha exhibido sus obras en galerías de Colombia, Estados Unidos, España y República Dominicana. Su arte va más allá de lo estético, transformando emociones en expresiones visuales que conectan profundamente con el espectador.
Los ODS: un marco global para el cambio
Adoptados por las Naciones Unidas en 2015, los ODS constituyen 17 metas globales que abordan desafíos cruciales como la pobreza, la desigualdad y el cambio climático. Su propósito es promover un desarrollo sostenible y asegurar que toda la humanidad goce de paz y prosperidad para 2030, mediante la colaboración entre gobiernos, empresas y sociedad civil.
Impacto y ubicación
La obra, creada para la ONG Suforall (Sostenibilidad para Todos), se ha convertido en un símbolo emblemático de la organización e invita a reflexionar sobre el impacto positivo que lograríamos si todos aplicáramos los principios de sostenibilidad.
Actualmente, el cuadro se exhibe en Basilea, Suiza, una ciudad conocida por su rica tradición artística, donde sigue suscitando emoción, generando diálogo y concienciando sobre los desafíos globales y el legado para las próximas generaciones.
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